El verano es un momento muy esperado por los niños por que para muchos es sinónimo de vacaciones. Sin embargo, muchas veces este periodo puede ser un reto para los padres, quienes se cuestionan sobre cómo mantener activos y entretener a los niños durante esas semanas.
Según los expertos, la clave es no tener miedo a que se aburran, ya que es una oportunidad para fomentar la creatividad y la autonomía.
En vista de que la familia chilena está cambiando y cada día hay más mujeres que se incorporan a la fuerza de trabajo. No todos los niños tienen la oportunidad de pasar las vacaciones con sus padres.
Esto genera en algunos adultos preocupación y sentimiento de culpa, pero no hay que desesperarse, porque existen excelentes alternativas para que los más pequeños lo pasen bien y desarrollen su creatividad durante este tiempo.
“Lo más importante es valorar el aburrimiento de los niños como una oportunidad, ya que desde esta situación, aparentemente negativa, es posible fomentar su creatividad y autonomía.
Necesitamos aprovechar este tiempo para que los niños puedan jugar libremente e inventar situaciones novedosas.
Para que esto suceda, debemos ofrecerles oportunidades de autonomía y espacios para crear. Tengamos presente que el aburrimiento puede ser el punto de partida para la creación”, explica María Luisa Orellana, Directora de programas educativos de Jardines Vitamina.
A continuación, la experta en educación nos entrega una serie de recomendaciones para que los papás puedan potenciar el entretenimiento de sus hijos en la casa durante el verano.
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Aprovechar los materiales desechables
Recolectar cajas de cereales, de leche, de zapatos u otros, para invitarlos a construir algo que a ellos se les ocurra, como un robot o una nave espacial. Después pueden pintarlos y ponerles accesorios como botones o lana. La idea de hacer esto es que puedan entretenerse con elementos sencillos y además llevar su imaginación a un lugar sin límites.
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Descubrir el mundo de los insectos
Para que los niños estén conectados con la naturaleza, es llevarlos afuera a buscar insectos que ellos puedan tomar y apreciar. Ojalá puedan contar con una lupa para que los miren de cerca y si quieren conservar a los bichitos, pueden elaborar un insectario casero con una botella de plástico.
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Crear colecciones naturales
Consiste en valorar la iniciativa propia de los niños de tomar elementos de la naturaleza y coleccionarlos. Para promoverlo, es positivo invitarlos a buscar por tipos, por ejemplo, colecciones de hojas, de cortezas, de piedrecitas.
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Darles desafíos y promover que los enfrenten
Es un aporte a la entretención y creatividad de los niños invitarlos a que se desafíen. Por ejemplo: “te gustaría modificar tu pieza, ¿por qué no haces un dibujo de cómo te la imaginas?. Y cuando vuelva lo discutimos juntos”, “en esta pared pegué papel de envolver para que dibujes lo que te gustaría que hiciéramos juntos el fin de semana”
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Juegos con agua
El agua es el elemento preferido de los niños, por esto darles la oportunidad de jugar con agua es en este tiempo una buena oportunidad para mantenerse entretenidos y experimentar. Puede ser trasvasijando, mezclando con otros elementos, haciendo burbujas, mojándose.
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Invitarlos a cocinar recetas simples
Es también una experiencia valorada por los niños el poder “cocinar” y ver como a medida que lo hacen se transforman los elementos que usan. Pueden preparar por ejemplo: sándwich entretenidos, helados o jugos/batidos de fruta, ensaladas coloridas, bolitas dulces…
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Invitarlos a pasear por el barrio
Es una experiencia enriquecedora que les permite conocer en conjunto elementos claves de su entorno social; la arquitectura, instituciones, locales, museos, ferias entre otros, que puedan estar cerca del hogar. En estas instancias también se puede potenciar el acercamiento al lenguaje escrito, invitando a los niños a leer señaléticas o carteles que se encuentren en el camino.
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Invitarlos a realizar un picnic
Esta experiencia suele gustar mucho a los niños, ya que implica una preparación previa de los elementos que deben llevar, la comida y bebida que deben preparar, para luego compartir en familia. Puede ser dentro de la casa, en el patio, en una plaza o en un parque. Puede también enriquecerse con compartiendo juegos de lenguaje simples como “veo – veo”. Juegos de salón como memorice o juegos de creatividad como armar lo que deseen con legos.
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Realizar una fiesta de disfraces
Disfrazarse suele ser fascinante para los niños, ya que les permite “jugar hacer” y cambiar roles. La idea es que puedan intercambiar su ropa y accesorios, para luego realizar una pequeña fiesta con música y bailes. Disfruten juntos de una situación organizada y preparada.
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Jugar al cine
Esta experiencia involucra la preparación de un ambiente especial, para preparar un “cine en casa”. Oscurece las ventanas, asegurar sitios cómodos para todos. Preparar palomitas de maíz y escoger una película que quieran ver en familia. Esta propuesta se puede aplicar también a una sugerencia de compartir de los niños con invitados. Lo que requiere soporte y supervisión, y no necesariamente participación directa.
En cualquiera de las actividades, es fundamental que los adultos preparen los espacios y ofrezcan los recursos. Luego los dejen jugar de manera autónoma, siempre con una adecuada supervisión. Si existe la posibilidad de compartir con ellos los juegos, la idea es ser “compañeros de juego”. Mantén en mente que ellos puedan ser autónomos y creativos en su actuar.