Vitamina

Mito o realidad: ¿Desde qué edad podemos darle batidos nutritivos a los niños?

Tanto los batidos como los licuados se han puesto muy de moda los últimos años. Son rápidos de hacer y aseguran una alimentación completa en “otro formato”. ¿Pero son igual de saludables para los niños? Revisemoslo.

En el caso de los niños, pueden ser útiles en el caso que éstos no coman ciertos alimentos (verduras por ejemplo) y se pueden ofrecer desde el comienzo de la alimentación complementaria.

Un batido sí puede ser un alimento completo

A diferencia de los jugos, las frutas y verduras hechas batido, mantienen todo el alimento dejando la fibra intacta. Los niños sí recibirán vitaminas, minerales, proteínas y fibra de un batido. 

Si tu hijo no come espinaca, brócoli o camote, todos estos ingredientes pueden ser integrados en un batido o licuado. La única precaución es que el batido no tenga demasiada fructosa (en formato de fruta, ya que no hay que agregarle más).

Otro punto a considerar es que, si bien el formato es muy cómodo para salir de paseo o como “comodín” de una comida, al no tener que masticarlos ni dedicar más tiempo a comerlos, los niños pueden no saber reconocer cuándo han comido suficiente (es decir, no tienen la misma biorretroalimentación para regular cuánto están comiendo). Por eso, elige alimentos correctos para licuar: una combinación de verduras, una cantidad limitada de frutas (por la fructosa) y lácteos (de origen vegetal o animal). 

Algunos consejos para ofrecer batidos a niños: