Una forma de juego entretenida y que aporta beneficios para tu hijo es el disfrazarse. Con tan solo un par de prendas tu hijo puede imaginar y ser distintos personajes, desarrollando su creatividad y empatía.
Beneficios de jugar a disfrazarse:
- Aprende reglas sociales: tomando distintos roles al disfrazarse, el niño puede aprender normas sociales que son imprescindibles para su vida adulta.
- Desarrollo de la creatividad: las posibilidades que les da el disfrazarse, permite que su imaginación se potencie y jueguen sin límites. Pueden ser lo que quieran y hacer lo que quieran.
- Expresión de los sentimientos: como se trata de un juego, hace que sea más fácil para los niños mostrar sus emociones, ayudando a los niños con timidez o miedos.
- Fortalece las relaciones: el poder ser otra persona ayuda a que el niño desarrolle la empatía, por lo que le será más fácil comprender los sentimientos de los demás, permitiéndole mantener mejores relaciones con el resto.
- Mejora la comunicación: el tener que tomar un personaje hace que tengan que comunicarse de formas que no harían normalmente. Así experimentan con el lenguaje y palabras que quizás son poco comunes para ellos.
Consejos para disfrazarse
Puedes separar ropa que tú o gente de tu familia no ocupe, para que tu hijo pueda usar al momento de jugar a disfrazarse. Los zapatos, carteras o cualquier otro elemento que para uno puede ser solamente utilitario, puede servir para estimular la imaginación de tu hijo, asique permítele explorar con todo lo que haya al alcance.
Puedes disfrazarte tú también y jugar con tu hijo, aprovechando esa oportunidad para aprender de como tu hijo ve el mundo, y para enseñarle de forma entretenida ciertas normas o comportamientos adecuados. El poder desarrollar su imaginación permitirá que pueda expresarse con mayor libertad y que esté más receptivo a nuevo conocimiento.