Lograr que los niños se duerman y concilien el sueño, es una de las tareas más difíciles para los padres. Acá te compartiremos siete claves para que los niños duerman mejor.
¡A lavarse los dientes y acostarse!
Está comprobado por los especialistas que el crecimiento, desarrollo y disposición al aprendizaje de los niños, se facilitan con un buen nivel de descanso. Sin embargo, no todos concilian bien el sueño. Y es que mientras más temprana sea la edad en que los padres empiecen a favorecer la instalación de hábitos, los resultados serán más profundos y duraderos.
Lo principal es ver el dormir como un hábito que debe trabajarse insistentemente todos los días. buscar la forma de instalar rutinas que favorezcan el que los niños lo vivan de manera sana y natural, compartiendo esta visión con los distintos miembros de la familia y siendo “persistentes”.
La Directora de Programas Educativos de jardines Vitamina, María Luisa Orellana, nos entrega 7 recomendaciones para lograr que los niños duerman mejor:
1.-Establecer horarios:
Una buena idea es establecer horarios para las actividades previas al sueño, es decir, que tengan claro que hay una hora para jugar, comer y bañarse, entre otras actividades.
2.-Preparar el entorno:
Antes de dormir es necesario mantener un ambiente de serenidad y disminuir el nivel de luz para crear un escenario más tenue. Así dormirán más relajados.
3.-Bajar el ritmo:
Es fundamental disminuir la actividad una hora antes de irse a dormir y evitar que reciban estímulos directos del televisor, videojuegos o computador, durante este período.
4.-Preparar la cama:
Es importante que los niños vean su cama como un lugar para dormir y la relacionen solo con los tiempos de tranquilidad y descanso. Por lo tanto, es preferible evitar actividades lúdicas y agitadas en este espacio.
5.-Importancia del baño:
Un baño antes de que se vayan a acostar también los ayudará a relajarse y prepararlos para dormir. Esto será más efectivo si les hacemos un pequeño masaje.
6.-Leer antes de dormir:
Resulta beneficioso leerles un cuento acompañado por algún miembro de la familia y en oportunidades que “jueguen a leer” solos. Después apagar la luz y dormir hasta el día siguiente.