La televisión se ha convertido en un elemento central en los hogares de cada familia, pero sabemos que puede tener efectos negativos. Esto es sobre todo si pensamos en los bebés, ya que se recomienda que por ningún motivo un niño menor de dos años vea televisión.
La televisión no es necesariamente mala, si es que se limita su uso y se le enseña a los niños a verla con criterio, pero para los bebés su uso es negativo, ya que limita su aprendizaje debido a la pasividad que implica la televisión.
La importancia del aprendizaje en los primeros meses
Los niños pequeños para aprender necesitan de la interacción con otras personas y con el entorno que los rodea. Para esto son vitales las distintas experiencias que pueden vivir, por lo que necesitan tocar las cosas, ver caras, oír distintos sonidos y mover cada parte de su cuerpo.
Los efectos que la televisión tiene el desarrollo
- El lenguaje: para el aprendizaje del lenguaje es primordial la interacción con otra persona y cuando la televisión está encendida disminuye la interacción que un padre puede tener con su hijo, pudiendo derivar en un atraso en el desarrollo del lenguaje de un niño.
- La atención: los niños que ven televisión generalmente sufren más problemas con su capacidad de atención, ya que la televisión es un bombardeo constante de información que irrumpe en la concentración de un niño.
- Obesidad: el uso de televisión está directamente relacionado con la pasividad y el consumo de comida chatarra, lo cual a su vez está relacionado el desarrollo de la obesidad.
Hoy en día es casi imposible evitar el uso de la televisión, está en todos lados. Pero es importante tratar de limitar su uso lo más posible en los niños menores a dos años, y luego enseñarle al niño a usarla de manera responsable y consciente, para que sea un aporte al desarrollo en vez de un impedimento a este.