Vitamina

¡Para aprender no hay nada como jugar!

¡Algunos juegos tradicionales para disfrutar en familia!

Este año tienes cinco días para disfrutar al aire libre y en Vitamina queremos impregnar a toda la familia de nuestra cultura y chilenidad, por eso  les presentamos estos juegos tradicionales para que disfruten y aprendan en estas fiestas patrias:

A través de estos juegos, los niños aprenden a respetar normas, turnos y a desarrollar la paciencia, lo que en el futuro les ayudará en sus relaciones con sus pares.

El Emboque

El juego consiste en tomar el madero de forma vertical con una mano, de manera que el emboque quede colgando. El emboque tiene que ser lanzado al aire, para que el madero logre entrar al agujero.

¿Qué aprenden los niños?

Botar Tarros

Cada jugador lanzará tres pelotas contra los tarros dispuestos en una mesa. Debe existir dos distancias delimitadas, una para niños y otra para adultos. Quien bote más tarros gana.

¿Qué aprenden los niños?

La Gallinita Ciega

En este juego los participantes se ubican en un círculo y se toman de las manos. A uno de los participantes se asigna el rol de gallinita ciega, quién debe ubicarse en el centro con los ojos vendados, dar tres vueltas sobre sí mismo y luego debe intentar tocar a algún jugador e identificar quién es solo con el tacto. La persona que es atrapada por la gallina ciega debe permanecer quieta y muy callada; si la gallina no logra identificar al jugador, sigue siendo la gallina;si logra descifrar quién es, sede su puesto a quien fue atrapado.

¿Qué aprenden los niños?

Corre, corre la guaraca

Es un juego de percepción y sentido. Los participantes se sientan en el suelo, formando un círculo. Un solo jugador corre alrededor con un pañuelo en la mano y roza las cabezas mientras todos cantan: “Corre, corre, la guaraca, el que mira para atrás, se le pega en la pelá”.

La canción se va acelerando cada vez más a medida que se repite, hasta que finalmente, se deja caer el pañuelo en la espalda de otro niño. Si este no se da cuenta  y el jugador que está de pie alcanza a dar una vuelta completa al círculo, el que está sentado se convierte en ‘huevo duro’ y tiene que sentarse en el centro. Pero si se percata, debe correr dar una vuelta e intentar volver a su puesto antes que su compañero, si no lo logra, toma el pañuelo y continua el juego.

¿Qué aprenden los niños?